Jonathan Edwards (Octubre 5, 1703-Marzo 22, 1758), fue un teólogo y un predicador puritano de las colonias Americanas. Edwards fue el mas importante
teólogo y filósofo de América y uno de los grandes intelectuales. La teologia
de Edwards es asociada con la teología Reformada y la herencia Puritana Inglesa.
Edwards fue la figura prinicipal del Primer Avivamiento en los años 1733-1735.
A CONTINUACION UN EXTRACTO DE SU FAMOSO SERMON: "PECADORES EN LAS MANOS DE UN DIOS AIRADO"
"Aunque mano se una con mano, y una vasta multitud de los enemigos de Dios se combinen y asocien, son f·cilmente quebrados en pedazos. Son como grandes montones de paja ligera ante el torbellino; o grandes cantidades de rastrojo seco ante llamas devoradoras. Encontramos fácil pisotear y aplastar un gusano que vemos arrastrarse en la tierra; también es fácil para nosotros cortar o chamuscar un hilo delgado que agarre cualquier cosa; y así es fácil para Dios, cuando le place, arrojar a sus enemigos al infierno. ¿qué somos nosotros para que permanezcamos de pie frente a El, ante cuya reprensión la tierra tiembla, y las rocas son
arrojadas?
Ellos merecen ser arrojados al infierno; de manera que si la justicia divina se encuentra en el camino, no hay objeción eficaz contra el uso del poder de Dios para destruirlos. Antes, por el contrario, la justicia clama fuertemente por un castigo infinito de sus pecados. La justicia divina dice del arbol que da a luz las uvas de Sodoma, "¿para qué inutiliza también la tierra?" (Luc. 13:7). La espada de la justicia divina está en cada momento blandeada sobre sus cabezas, y no es otra cosa que la misericordia arbitraria y la pura voluntad de Dios que la detiene.
Ellos ya estan bajo una sentencia de condenación al infierno. No sólo merecen justamente ser arrojados allí, sino que la sentencia de la ley de Dios, esa regla eterna e inmutable de justicia que Dios ha fijado entre El y la humanidad, ha ido en su contra, y permanece en su contra; de manera que ya están dispuestos para el infierno. "El que no cree, ya ha sido condenado" (Juan 3:18).
De modo que cada inconverso pertenece propiamente al infierno; ese es su lugar; de allí Jesús les dice "Vosotros sois de abajo" (Juan 8:23), y allí están atados; es el lugar que la justicia, la palabra de Dios, y la sentencia de su ley inmutable les han asignado
Caesar Arevalo
( PARA LEER EL SERMON COMPLETO, POR FAVOR HAGA UN CLICK EN LA CONECCION DE ABAJO)
http://cimientoestable.org/files/PECADORES_EN_MANOS_DE_UN_DIOS_AIRADO.pdf
No hay comentarios:
Publicar un comentario